“Haz que se acuñe una medalla según este modelo. Todos cuantos la lleven al cuello recibirán grandes gracias. Las gracias serán más abundantes para los que la lleven con confianza”.
El Reino de Dios está dentro de nosotros. Ahora bien, a pesar de ser pequeño en su extensión, él tiene un valor infinito porque costó la Sangre de Cristo. Por eso, cada uno de nosotros debe conquistarlo para Nuestro Señor, destruyendo todo aquello que, en nuestro interior, se oponga al cumplimiento de su Ley.
¿Cambiará nuestra existencia? ¿Trabajaremos menos tiempo? ¿Qué pasará con el arte, literatura, la docencia? ¿Conviviremos con robots en un futuro no lejano? ¿Qué será del convivio humano? ¿Y nuestra relación con Dios? ¿Podría significar el fin de la raza humana?
Su semblante y sus gestos revelaban la mansedumbre del alma pura, la paz de espíritu y la alegría del deber cumplido. Resplandecía en ella la altanería sin pretensiones de quien se ha inmolado por entero y sólo tiene delante la muerte y la eternidad.
La última semana ha estado marcada por la barbarie del terrorismo de Hamás en Israel, con más de mil personas asesinadas, y la respuesta judía que ya se torna internacional con los ataques en el Líbano y Siria, en lo que ya se vislumbra la posibilidad de un conflicto de proporciones mucho mayores.
No hay problema por más difícil que parezca: sea temporal y, sobre todo, espiritual; sea referente a la vida personal de cada uno de nosotros o a la vida de nuestras familias, del mundo o a la vida de los pueblos y naciones; no hay problema, por más difícil que sea, que no podamos resolver ahora con la oración del Santo Rosario.
El Doctor Plinio Corrêa de Oliveira nace el 13 de diciembre de 1908 y fallece el 3 de Octubre de 1995. Líder Católico, inspirador y formador de Monseñor João Scognamiglio Clá Dias, EP, fundador de los Heraldos del Evangelio. Conozca más sobre los últimos días de vida del Dr. Plinio relatados por el propio Monseñor João Clá.