La fuerza y la suavidad son dos cualidades que en el Señor refulgen con un brillo insuperable, en la armonía más completa. Ambas constituyen un arco gótico, cuya ojiva eleva el corazón humano a los más altos niveles.
“Formamos un solo cuerpo, y todos nosotros bebemos de un solo Espíritu” (1 Cor 12, 13). ¿Quién es el Espíritu Santo, cómo fueron las circunstancias y […]